Despertares y reproches (2/12/09)

Él asiente con firmeza, dispuesto a seguirte donde le lleves.

-Recuerda, educación y confianza en uno mismo. No te arruges ni seas descortes, y todo saldrá bien... Vamos, Antón nos espera.

Y empiezo a caminar, bajando las escaleras.

Antón está abajo, bien vestido, como es de esperar.

- Buenas noches, Miller - saluda, casi con cautela.

Arrugo levemente la frente.

-... Buenas noches... Antón -respondo, con cierto desagrado, pero manteniendo las formas-... ¿Hemos pensado en algo para esta noche?

- Primero iremos al Eliséo, hace tiempo que no me paso y deben estar preguntándose dónde me he memtido. Serás mi excusa - dice sonriendo un poco.

Alzo una ceja. "¿Primero?"

-... ¿Y después?

- Pasaremos por alguna fiesta - te responde -. Todo aburrida etiqueta, lamento informar.

-... Podré soportarlo -digo, como si en realidad me hiciese gracia-... ¿Cual es la naturaleza de esa fiesta? Todavía falta un poco para la navidad.

- Los toreador no necesitamos excusas para montar una fiesta - te responde -. Es cuestión de arte. No te preocupes.

Suspiro, mirando al suelo.

-... Mínima esperanza de exito... riesgo de fracaso... -y luego levanto la vista, mirando a Antón-... ¿A qué esperamos?

Sonríe con más confianza.

- Estaré yo allí para evitar que te linchen - responde, luego mira al Nosferatu -. Sé que lo harás bien - dice antes de salir.

Unos ghouls os acompañan hasta la limousinne.

/Limusinas y oropel, Eliseo (2/12/2009)/