Deseo de Humanidad 5/01/10

- Es bastante peligroso... y no quiero que la apse nada... pero no merece vivir con miedo.

-... Leer mentes es más fácil de lo que crees. Un Ventrue que sepa cambiar y borrar recuerdos ya tiene acceso a ellos. Pompingan se metió en mi mente la primera vez que miré a sus ojos. El resultado fue la muerte de la novia de Basile cuando las cosas se complicaron y él trató de defenderme.

Cada vez que lo pienso, me dan ganas de reventarme por un precipicio.

-... Tampoco podemos tener pajaros en la cabeza. Tenemos que pensar también la forma de abogar por ella si se llega a descubrir.

En lo que dice Antón... hay mucha razón, pero no voy a permitir que eso pase.

-No morirá -digo con seguridad-. Estará contigo, y no tendrá miedo.

Cruzo los brazos y cierro los ojos, pensando... Me la imagino ahí, sola, desamparada, asustada, y, sin embargo, arriesgandose por los demas, como hizo con Vic... Además...

-... Hagamos lo que hagamos, nada cambia lo que es.-abro los ojos.- Siempre habrá un riesgo de que alguien la descubra, esté donde esté. Ha debido de vivir siempre con miedo, escondiendose, tratando de no llamar la atención con su mutismo, y siendo tan guapa ha debido pasarlo verdaderamente mal, hay demasiados hombres que no saben... contenerse.-Iba a decir algo muy malsonante.-Aquí ha encontrado algo de felicidad después de tanto tiempo... no creo que debamos arrebatarselo así, aunque sea "por su bien". Puede que tratando de protegerla la hagamos aún más daño. Además, hablo por experiencia propia.-Mi padre me mantuvo alejada y a oscuras por mi propio bien, y he perdido lo que más amaba, he caminado por una linea muy delgada por no saber a lo que estaba jugando. Y encima seguro que hubiera conseguido apartarme de mis pinturas si me hubiera dicho la verdad.-Yo creo que si su decisión es mantenerse en esta casa, deberiamos respetarla. Nosotros somos lo suficientemente fuertes para protegerla, seremos todo lo fuertes que haga falta por ella. Ya está bien de que la bondad se pague con dolor. No es justo que por proteger a alguien haya tenido que acabar en un sitio donde no quiere estar. Demosle algo bueno a cambio, algo que la haga feliz de estar viva. Nosotros la protegeremos, podemos hacerlo, no hay mayor fuerza que la de proteger a un ser querido.

Dice todo lo que mi convicción necesita y mis palabras no terminan de decir.

-Estoy totalmente de acuerdo.

ANtón se queda un largo rato pensando:

-.............................................Sea

Sonrio al escuchar la respuesta de Antón. Bien, ahora solo hay que procurar que aquí no la pase nada.

- Ve ya - dice, parece preocupado.

Cojo el teléfono, y llamo a Alan.

-¿Voy contigo?-Pregunto a Curtis antes de que llame.

//Fdi: Que no me has dado tiempoXDXD//

Asiento, mientras espero a que respondan.

- ¿Qué pasa? - pregunta, probablemente la vez más amable que ha contestado al teléfono.

- ¿Para que su amo pueda tirársela? - dice, sin cortarse - No me gusta nada como dejasteis a esa chica, antes de que pasará... lo que ha pasado hoy, Claire había mejorado mucho.

-No fuimos nosotros, Alan... -digo, pero pienso con tranquilidad. Empiezo a caminar, y salgo del salón, para poder hablar francamente, cerrando la puerta-... Alan, lo único que quiere Claire es volver... Y no queremos que viva atemorizada ni perdida en si misma. Es buena chica... Y queremos que sea feliz. Debimos darnos cuenta de que era nuestra responsabilidad protejerla, fuimos egoistas y no pensamos en lo que ella quería cuando la mandamos con vosotros... Pero tenemos que arreglar las cosas.

- ... Con una condición.

- Iré a verla una vez por semana, y si algo va mal... lo pagaréis.

... Se ha acabado responsabilizando de ella emocionalmente.

-... No te culpo por desconfiar de nosotros... Está bien, pero tendremos que hablarlo cuando lleguemos.

Me paso la lengua por los labios fugazmente.

-Berenice vendrá conmigo a recojerla. Nos pasaremos pronto.

- No me pienso mover, así que cuando querais.

-Te daré un toque en el descampado.

Cuelgo, y vuelvo a entrar.

-¿Y bien?-digo cuando le veo entrar.

-Dice que sí... pero que vendrá una vez por semana a ver cómo esta... -digo, ya con dolor de cabeza-... Le contesté que ya lo hablaríamos allí.

- ¿Venir a verla? - dice con una mueca de desagrado - ¿A mi casa?