Nosferatus... ¿Aliados o enemigos? (27/11/09)

Triage te mira extrañado.

- Nada... ¿Por qué te pones a la defensiva? Sólo bromeaba para hacer más llevaderas las tensiones...

-... Por nada. Detesto a los Tzimisces. Lo que hacen es asqueroso.

A punto he estado de cagarla. Por suerte tengo el suficiente autocontrol para no ponerme nervioso.

-Me gustaría reunirme de nuevo con Emile y Basile. Quisiera darles refugio cuanto antes.

Caminamos hacia donde dejamos a los dos. El refugio puede que sea bajo tierra... tendré que tranquilizar a Emile y explicarselo. A mitad de camino, le pregunto.

-... Por cierto... mi ghoul tiene necesidades, ¿podríamos conseguirle algo de alimento?

- Ya hemos contado con ello, no te preocupes... estará a salvo - responde, sonriendo para tranquilizarte.

Basile se te acerca y los Nosferatu se tensan un poco.

- ¿Todo bien?

Asiento, agradecido.

-... Me alegra oirlo -digo, sonriente.

Cuando llegamos y Basile me pregunta, asiento de nuevo.

-Nos proporcionarán un refugio seguro hasta que esto se resuelva, a tí incluido.

- Vuestra generosidad es muy de agradecer, caballeros - dice Basile, inclinando la cabeza.

Triage contesta de la misma forma, educado aunque serio, después os guia por las catacumbas que ya conoces. Emile, asustada, se aferra a ti. Llegáis asi a una estancia limpia y aclimatada, como una habitación de hotel. Hay una nevera con comida y un servicio, además de un par de camas.

Tranquilizo a Emile, dándole confianza. Sin embargo no puedo evitar sonreir cuando se abre la puerta y aparece una habitación digna de un hotel.

-... Impresionante Triage. Admito que no me lo esperaba.

- ¿Y qué esperabas? ¿Ratas en las esquinas? - Triage no se da cuenta de lo desafortunado de la broma hahsta ue mira a Basile - Disculpa...

Basile hace un gesto para restarle importancia.

- Bueno, os dejo para que os acomodéis... - se despide Triage.

-... Si un día llego a tener esta magnitud de recursos, la proxima vez serás tú el invitado -le digo, sonriente-... Gracias por todo.

Triage se marcha, asintiéndote con reconocimiento.

- Buenos... ¿hasta cuando tenemos pagado el hotel?

Suspiro con cierto alivio.

-Dos días, tres como mucho... lo que tarden en averiguar si lo que les he dicho es cierto o no. Pero al fin estamos a salvo.

Emile se acerca y te da un beso.

- Ha sido una noche agotadora... - dice bostezando.

Correspondo de igual forma.

-Antes de lo que crees estarás durmiendo en tu casa -le digo con cariño. De pronto me doy cuenta de que ese día no me he alimentado... tal vez sea hora-... Deja que te ayude a dormir.

Acerco mi boca a su cuello y empiezo a beber.

La mezcla del placer y la debilidad hacen que caiga rápidamente en tus brazos.

Cuando noto que su peso se rinde en mis brazos, la cojo sin demasiada dificultad, y la acuesto con cuidado en una de las camas.

Hacía días que me estaba dando cuenta de una cosa. Como veo que está dormida, no me cuesta hablar.

-... Al principio creí que tener un ghoul era como tener una mascota... eso me enseñaron, algo de lo que no me debía preocupar demasiado... Pero con el tiempo... Cada vez me siento más dependiente de ella.

-No te cortes, ahora mismo siento lo mismo que tú -le digo, refiriendome al Sabbat, y luego vuelvo a mirar a Emile-... Espero causarle más bien que mal. No se que haría si le pasara algo, pero seguro que sería una estupidez.

Hablo con voz calmada, cansada...

- Bah, no digas tonterias, tú y yo no dejaremos que le pase nada ¿cierto? - se tumba en la otra cama, tranquilamente, finjiendo despreocupación.

-... Por supuesto -digo con seguridad. Sonrio cuando le veo en su cama, despreocupado.

Voy a la cama de Emile, y me acomodo a su lado, abrazándola mientras duerme. Su calor es reconfortante.

-Buenos días, jefe.

Puedes verle sonreir, aunque tiene los ojos cerrados.

- Buenos días, Curtis.

/Reacciones inesperadas, Territorio Nosferatu (28/11/2009)/