Fuego en el alma (23/01/10)

Te da la dirección. No está muy lejos de allí, a unas treinta manzanas.

Voy y me meto en el coche, voy directo hacia allá.

Sean quienes sean los supervivientes, tengo que llegar a ellos. No sé como de amenazada está la mascarada.

Arrancas, vas directos hacia ellos a toda velocidad cuando de repente una figura surge de la nada en mitad de la carretera, justo frente a ti. Es Pompignan.

Freno lo más rápido que puedo.

Frenas, pero está demasiado cerca. Adelanta un brazo contra el capot y lo abolla, haciendo que la parte trasera del auto se levante considerablemente. Felizmente, no das vuelta y el coche vuelve a tomar tierra con brusquedad. Te golpeas la cabeza contra el techo a la subida y contra el volante a la caída.

¡Me cago en la puta!... Del susto apenas me ha dado tiempo para pensar. ¿Pero qué se cree que está haciendo? ¡Habrá docenas de testigos!

-¡¿Te has vuelto loco?! -digo, intentando salir del coche.

Sales del coche e inmediatamente recibes un puñetazo que te deja medio lelo. Tu cabeza rebota contra el asfalto y tu cuerpo se arrastra por él unos metros quemándote la piel.

¡¡DIOS!!

-¡¡¡AGHHH!!! -digo después de acabar en el suelo. Trato de levantarme... pero todavía noto que todo me da vueltas, y vuelvo a caer-, ¿pe... pero qué haces?

Está empezando a acojonarme. Es evidente que la mascarada se ha ido a tomar viento... ¿pero ahora qué pasará conmigo?

Le tienes cogiéndote de la pechera, y grita en tu oído hasta dejarte un pitido:

- ¿¿¿DÓNDE ESTÁ???

-¡¿De... qué coño me hablas?! -digo, intentando mantenerme entero-, ¡no entiendo nada!

- La chica - te cruza la cara dos veces en menos de un segundo -, imbecil,. ¡¿Dónde está?!

Parpadeo.

-¿De qué chica me hablas?... ¿Berenice?... Está con el príncipe... y ahora mi casa está en llamas...

- ¡LA CHICA, ESTÚPIDO! ¡LA QUE ATACASTE EN SU CASA, ALIMAÑA! - no sabes ni cuántos golpes te ha dado mientras hablaba, no tardarás ne perder el conocimiento.

¿Qué?

Mierda, no tengo tiempo ni para pensarlo.

-¡No la-no la ataqué! ¡alguien la estaba matando!

- ¿Dónde está? - pregunta siseante, con los ojos rojos.

-... La escondí... para que no la mataran... te la traeré.

Trago saliva.

-... Pero... no conseguí salvarla... del todo...

- ¿Qué diablos quieres decir? ¿NO ESTARÁ HERIDA?

-Tranquilícese... Déjeme explicárselo...

Me matará en cuanto se lo diga... parece que le importa.

-Llegué a su casa... había un rastro de sangre en la entrada. Entré... La encontré tumbada en la cama. Había un vástago allí que me atacó, pero le retuve...

Trago saliva de nuevo.

-... Alguien le encargó a ese don nadie que la desangrase y la dejase allí... Lo retuve con mi poder mientras intentaba salvarla... Tenia varios mordiscos en el cuello, su latido cada vez era más débil... Traté de salvala.

Cierro mis ojos.

-... Intenté devolverle la sangre perdida y entonces nos alcanzó el amanecer...

- ¿VIVIÓ? ¡DIMELO, MALDITA SEA!

-...... Sí... y no............. Cerré su herida, la alimenté... pero no había bastante sangre en su cuerpo cuando la recibió.

Tardo un poco en añadir.

-... Ha... cambiado.

Te mira, frunce en ceño, lo desfrunce al comprender. Te suelta.

- ¿Qué? - pregunta casi sin voz.

- no es... una... lasombra... ¿Verdad?

........................ Seguramente serán las últimas palabras que diga en esta vida. Habría deseado ver a Emile una última vez.

-... Lo siento...

Se lleva una mano a la cara.

De pronto te agarra de la pechera.

- Vas a morir - dice levantando el puño hacia atrás.

De pronto suena su móvil. El lago de los cisnes.

- No-muevas-un-musculo