Nueva vida 3/1/10

- Quiero que vuelva a ser el de siempre - dice mirándole mientras agarra los barrotes.

-Para conseguir lo que queremos, hay que trabajar en ello. Las cosas simplemente no vienen por quererlas. Y en caso de que vuelva, no puede volver el Arnold que torturaba a inocentes. ¿Recuerdas lo que te he mencionado de las cadenas y los eslabones, y del mundo que gira? Arnold tiene una oportunidad para salvarse. Todos sus actos se le han venido encima, y este es el resultado. Sin embargo, hubo una cosa, una pequeña cosa, que ha sido lo que le ha salvado la vida, y puede salvar su alma. Uno de los eslabones que hizo, le ha dado esta oportunidad. Uno que no está teñido de dolor.

- ... si le ayudo... será bueno para él... y para mí... ¿no?

-Así es.

Me acuclillo a su lado y pongo una mano sobre su hombro.

-¿Sabes por qué os puedo ayudar? Por que Arnold tuvo compasión de mi. Valoró mi vida y la salvó. Si no lo hubiera hecho, más tarde o más temprano, os hubieran matado a todos. ¿Y sabes por qué quiero hacerlo? Porque comprendo el dolor ajeno, porque lo he sufrido en carnes propias, y por qué sé lo que vale un solo momento feliz. Si yo hubiera sido otro tipo de persona, si me diera igual, o peor aún, si disfrutara del dolor como haciais vosotros, no me hubiera inmutado, y estariais todos muertos. A su vez, Lucía,-Duele...- la humana que tratabais con tanto desprecio, si no me hubiese recogido cuando fui abandonada, yo no hubiera vivido lo suficiente para poder tener oportunidad de salvaros. De la misma manera, mi padre, el que usasteis y matasteis.- no puedo evitar un ligero temblor en la voz al recordar sus gritos.- me salvó de un vampiro que hacía las mismas salvajadas que vosotros, y se llevó por delante a todos mis hermanos. Sin él, yo no podría haberos salvado ni podría ayudaros. Igualmente, si los miembros de esta casa no me hubieran ayudado y apoyado, me hubiera hundido tras la muerte de Lucía y no hubiera sido capaz de ayudaros a ninguno de los dos. Igualmente, si el señor Antón no hubiera permitido que permanecierais aquí, ambos estariaís muertos.-Hablo pausadamente, con voz tranquila, tratando que entienda lo que le digo y haciendo pequeñas pausas para que lo asimile.- Si en alguna ocasión logras sentir algún agradecimiento hacia mí, ese agradecimiento también es para todos los que, arriesgándose, me han ayudado a llegar hasta aquí. Sólo ayudando a otros, podemos ayudarnos a nosotros mismos, y dar la oportunidad a otros de que se ayuden.

- ¿Cómo puedo ayudarle?

-En primer lugar, siendo paciente. Recuerda que nosotros vivimos mucho más que los mortales. En segundo lugar, nada de hacer daño a nadie. Eso es importante. En tercer lugar, tienes que portarte bien y tratar con respeto y educación a los demás, especialmente a los señores de esta casa. Ambos les debemos más de lo que piensas, y cuando te hacen un favor no está bien responder de malos modos. De esta manera, te mantendrás a salvo, nos mantendrás a salvo a todos y por ende, a Arnold.

Asiente.

- Lo haré

Sonrío. Le doy un abrazo.

-Ambos nos esforzaremos por él, ¿de acuerdo?

Asiente, aunque se le nota triste.

Arnold permanece allí, como si no oyese nada.

Me separo suavemente, y le miro a los ojos.

-Será mejor que subamos. Aún hay una cosa que hay que hacer... ¿recuerdas?

Asiente, y vuelve a buscar tu mano antes de subir,

Se la cojo suavemente y con firmeza. Lo llevo de nuevo a la habitación.

-Veamos.-digo cerrando la puerta.- Antes dime, ¿cómo llevas esa herida?

Él te la enseña, retirando un poco los vendajes. Aún no está curada.

-No me parece buena idea que hagamos esto con esa herida así... ¿necesitas más sangre?

- Me vendría bien... aunque no parece servirme de mucho con esta herida.

Miro el reloj. No queda mucho para que amanezca.

-Ya va siendo hora de ir a acostarse...-Miro al niño.- Mañana conseguiré más sangre y nos pondremos con los dibujos. Tal vez no lo parezca, pero tengo bastante idea de proporción y anatomía.-Que remedio si quiero ser tan realista a la hora de dibujar. Me siento en la cama y me quito los zapatos- Vamos a dormir. Mañana será otra noche.

//weno, abro al dia cuatro? ^^

//FdI: Espera que se acuesten ¿no? xD//

- De acuerdo - se echa a dormir, aunque parece costarle coger el sueño, y tarda un rato en cerrar los ojos.

Me recuesto a su lado. Le acaricio suavemente una mejilla antes de decir:

-Buenos días, Elliot.

Luego dejo que el sopor del día me inunde... creo que no podría dormir de otra manera.

//Fdi: Abre, abre XDXDXD//