Hora de moverse (21/01/10)

No hay nadad e particular en sus cosas.

Asiente cuando la preguntas, aún mirándote acogojada.

- Soy... comercial de ventas... me dedico a la... inmobiliaria... - dice como puede.

... Parece sincera...

-... Respira... despacio... no tienes nada que temer de mí mientras respetes lo que te digo...

... ¿Una comercial en un parque?

-¿Por qué salias de un parque a plena noche, y bebida?... no tienes pinta de ir de fiesta así.

- Mi... prometido me ha... abandonado...

La miro... ha perdido a alguien... o eso parece... ya tenía dolor en su rostro antes de capturarla.

Lo comprendo...

-... Tranquila... No te haré nada...

Me acerco despacio... y acerco mis manos a una de las suyas... la que debería tener el anillo... Observo sus reacciones cuando la tomo... Mis dedos acabados en uñas largas y negras pasan con cuidado por su piel... sutilmente. Observo como reacciona.

-... ¿Por qué te hizo eso?

Tiembla como una maraca.

- Po-porque n-n-n-n-no estaba pre-parado.

Acaricio el dorso... con suavidad.

-... No debió hacerte eso... Seguro que te ha dejado un vacio que sientes que nadie puede llenar... que sus palabras de despedida sólo son un pretexto... que algo se ha quebrado en tí... ¿verdad?

Tu contacto la hace temblar más.

No dice nada.

-... Tranquila...

Dejo de acariciar su mano.

-... ¿Tienes crias? ¿Hijos?

-... Estoy embarazada...

Embarazada...

-... Permanece quieta... totalmente quieta.

Me acerco a ella... y descubro su vientre, para después poner la mano en el mismo, con cuidado... Quiero saber si siento algo.

Notas más sangre circulando por ahí de lo normal. Ella llora.

Mierda... estaba seguro de que ella podía servirme...

Frunzo el ceño un poco.

-... Shhhhh... -digo, cerrando de nuevo su ropa-... Voy a hacerte una pregunta, y tu respuesta me dirá si te dejo o no marchar...

Me tomo unos segundos.

-... ¿Quieres que tu cria llegue a este mundo?

- Sí - solloza - Sí, por Dios, le daré lo que sea a cambio.

..... maldita sea.

-... Necesito que te calmes y me escuches... -trato de decir, ya sin intentar infundir miedo, retraigo mis alas. Ya no hay dureza en mis palabras-... No voy a herirte... ni quitarte tu cria... pero necesito ayuda.

- ¿Ayuda?... Sí, lo que quiera... ¿Para qué me necesita?...

... Sé que sientes... un lazo... un vínculo con tu bebé aunque no ha nacido aun, dificil de explicar... lo llamais afecto, cariño, amor...

Bajo levemente la cabeza.

-... Tengo una hija... es la criatura más preciosa e inocente que puedas imaginar... y... la tienen prisionera y esclava... No puedo recurrir a nadie para salvarla... por mi aspecto.

La miro a los ojos.

-... Por eso hago cosas como esta. No tengo elección...

- Lo... lo siento - no parece saber qué decir, ni como tomarse tu declaración.

-... No creo que me puedas ayudar con ese bebé... ni que vayas a acceder a ello... Pero necesito ayuda...
La miro a los ojos.

-... Si tuviesen esclavizado a tu niño, en condiciones como las de un perro... ¿harías lo imposible verdad?

Asiente.

- Yo.. yo te ayudaré... con tu cría... si no nos pones en peligro, ni nos haces daño, yo te ayudaré.

-...

Sólo no conseguiré nada... Ella sabe mi secreto, si no estoy cerca, puede pasar cualquier cosa. Ya he entrado en su vida, no puedo hacer más que intentar ayudarla.

-... Escuchame atentamente... no lo digo para meterte miedo... lo digo por tu bien... Si cuentas lo que soy... sólo te dará problemas. Te tacharían de loca, o peor aun, alguien te creería, y correría la histeria en las calles, muchos morirían sin razón en medio de caos y desorden buscando monstruos... y no soportarías ese cargo de conciencia... Debes guardar este secreto... por tu bien, el mio y el de los demás...

Me levanto despacio... y ofrezco mi mano, para que se apoye y se levante si lo quiere.

-No debes decirselo a nadie... Además, si guardas el secreto, puedo hacer cosas por tí que nadie puede... no soy injusto.

Ella agarra tu mano, dubitativamente.

La levanto, con delicadeza.

-... No has estado más segura en tu vida... pero para ello debes confiar en mí. Puedo ser tu guardián si lo deseas... a cambio de tu ayuda.

- ¿M-mi guardián?