Sesenta y un días después (16/01/10)

Me quedo parado un segundo... y sonrio.

-... Siempre estaré contigo para poder decirte lo bella que eres... -digo, besándola... La abrazo... doy calor a mi cuerpo, para que ella no se sienta incomoda.

-... Puede que también necesitemos... ghouls cuando pase. No podremos alimentarnos sólo entre nosotros cuando seas como yo.

- No me importa... - se acurruca en ti.

La recojo con mis brazos... tan calida... llena de vida... no quiero que se corrompa por mi sangre.

-... Pero por encima de todo... debes conservar tu humanidad... actos como matar destrozan por dentro Emile... y en nosotros se refleja volviendonos... monstruos con el paso del tiempo... Y no te lo digo porque sí cielo -la beso en la frente-... Tenemos un depredador dentro, y cuanto más nos despreocupamos, más toma el control. Por ese camino nos volvemos huraños, ariscos, egoistas... olvidando la piedad... Antón estuvo a punto de ser tragado por esa espiral, volviéndose un animal... lo viste en su momento.

La abrazo con un poco más de firmeza.

-... La vida es algo valioso cielo... practicamente sagrado... no debemos arrebatarla.

- No... aunque me gustaria matar a Villon.

La miro...

-... Quítate esa idea de la cabeza Emile... es peligroso... y una de las cosas que debes aprender es mostrar respeto al señor de la ciudad.

Baja la cabeza.

- De acuerdo...

- Hace daño a Basile... no tiene consideración contigo, ni con el señor Antón... no te deja convertirme...

Beso su frente.

-... Nada es tan sencillo como parece... pero por una vez intento hacer las cosas bien... públicamente somos los malos de la película. Por eso hacemos todo esto, para demostrar que no lo somos.

La acaricio.

-... Los vástagos también tenemos nuestra historia social Emile... hay clases sociales, y no suelen gustarse entre sí.

- Somos como... ¿marginados? - no parece gustarle la idea nada.

Marginados... no hay mejor palabra que nos describa... ni despectiva ni exacta... Acaricio su pelo.

-... Miembros a prueba más bien... Se recela mucho de un lobo que entra en un gallinero diciendo ser amistoso.

Solo que en este caso el gallo podría arrancarte la cabeza sin tocarte...

-... No nos darán nada regalado... nos lo tenemos que ganar.

Asiente, parece comprenderlo.

Poco a poco se acerca el amanecer.

-... Lo tendrás... no desesperes... todo a su tiempo... y sabes que procuraré que sea poco.

Poco a poco me duermo... no sin antes decirle que la quiero.