Año nuevo (1/1/10)

Abro la puerta y me asomo preguntando:

-¿Te cojo en mal momento?

- Pues no, dime.

Entro, cerrando la puerta tras de mi. Me apoyo en ella, mirando al suelo.

-...El niño dice que nunca antes había hecho una cosa así, pero que lo intentará.

- Su aspecto no es lo que más me preocupa a mí, en cualquier caso.

-Lo sé... y en el fondo sé que es una locura, pero... he perdido el miedo de repente.

- Pues no temas por ti pero... teme por todos lo demás...

-... pese a lo que ha dicho Antón, sigo pensando que el mayor peligro sigo siendo yo...

- No, si no haces tonterias - sonríe, tranquilizador.

-...Basile, no confies tanto en mi. Estoy segura de que sabes porque he mencionado a Arnold antes.

- Si vas a hacerlo... te meterás en un lio con Antón ¿Lo sabes, no?

-... si voy a hacerlo no espero salir viva de esta.

- Tienes mi apoyo, si crees que es lo que debes hacer.

-Gracias. Sé que todos pensais que estoy con... ese síndrome de estocolmo. Pero no es así... no entendeis bien como razono, ni como fue realmente mi vida como humana, ni el daño que me hizo mi sire, ni lo que pasó en esa semana que pasé retenida. Por eso Basile... creo que lo mejor que puedes hacer es no meterte en esto. Y no voy a ser tan estúpida de darle al príncipe mis razonamientos, sé que a él no le sirven.

- ¿Y qué harás?

-Pues...sinceramente, haber si me lo dejaba como "mascotita". Después de lo que ha pasado, no sería de extrañar que personalmente me quisiera ensañar con él, y sinceramente, ahora no me preocupa que vea mi aura: siento el alma tan dolorida que no creo que haya otra cosa. Ahora mismo, lo poco que no duele son como chispitas de luz que aparecen y se desvanecen, sin dejar nada concreto. Igualmente... tengo que averiguar si mi padre me dejó... "en herencia" algún domicilio o algo. Antón no va a permitirlo aquí, y tampoco quiero traerlo. De todas formas... necesito estar sola, organizarme las ideas... sé que Curtis se siente terriblemente culpable, y no puedo permitirme que me pase lo de esta mañana.

- No sé si irte a otro sitio será seguro, Berenice, y menos cargando con un Sabbat.... Además, Antón nos ha nombrado su familia - dice con comprensión de todo lo que eso implica.

-A veces para proteger a tu familia, tienes que alejarte de ella. Y te lo repito: no pretendo salir viva de esta.

- No voy a permitir eso. Ni Curtis lo hará tampoco.

-Lo hareis... si de verdad os importo. No tienes ni idea de... lo que me alegra que seamos familia... pero Antón a elegido el peor momento para decirme algo así. Me habeis cargado con algo demasiado grande para mi en estos momentos. He perdido a mi familia... cuatro veces. La primera porque me abandonaron, las otras tres porque los mataron. Mi existencia ha sido... y es muy dañina, no lo aguanto más. Y la excusa era "por el bien de mi familia". Todo lo que hice... y para nada. Te lo dije, Basile, te lo dije antes. Si matan a Lucía, me matan a mi también.

-Basile, ya es muy tarde: yo ya estoy muerta. Y esta es la única decisión que tomo ... completamente libre.

Basile se encoge de hombros.

- Tu decisión es hacerlo, la nuestra que no tengas graves consecuencias.

-Basile... no se lo vayas a decir, por favor. Lo que te he venido a pedir es que te apartes de este asunto, que ya es bastante turbio de por si.

- Hermanita... no voy a dejarte sola - dice dándote unas palmaditas en el hombro, antes de echarse en la cama.

Me pongo tensa cuando dice esa palabra, "hermanita". Por un momento... por un momento noto como me va a dar un ataque como el de antes, a duras penas logro controlarlo... pero ahora se donde estoy y quien soy. No lo entienden. No terminan de comprender que es lo que implican para mi esas palabras. No terminan de entender que ahora mismo no puedo con lo que conllevan. No lo entienden. Hago un soberano esfuerzo para moverme y abrir la puerta... antes de irme digo, con un hilo de voz.

-No me llames eso, Basile... no puedo.... no puedo.

Tras lo cual me voy al salon...