Hablando de principes... (1/1/10)

-... También hay que pensar en la forma de llevarlos... necesitaremos una furgoneta o un camión pequeño... Por no hablar del impacto que generará en el Eliseo cuando los lleven adentro.

Vamos, no seas estúpido, Jacky.

-... A no ser que tengan otro lugar para tratar este tipo de asuntos.

-Bueno... la última vez entramos por una puerta trasera.

- Efectivamente. Manda a uno de tus chicos a hacer de choffer, yo conseguiré la furgoneta. Y Berenice, recuerda que ante el Príncipe son sólo renegados de la Camarilla.

-Si señor, ya me di cuenta de que no los llamaba Sabbats. De todas formas... tampoco necesito un choffer, puedo conducir sola.

-... Tendré que decirles que anulen la noche libre por ahora -digo, suspirando.

Espero que Berenice sea cortés. Cuando ví a Villón por primera vez me dio un escalofrío. Posiblemente es 25 veces más viejo que yo.

Cuando dice eso, alzo una ceja.

-... No sé si el príncipe vería apropiado que tú te ocupases de conducir una furgoneta llena de cadaveres... -miro a Antón, con el teléfono en la mano.

- Llama a tus chicos.

-¿Y si el choffer fuera Basile? Tiene una furgoneta, ¿no?

- Basile tampoco es especialmente bin recibido allí... pero si quereis...

Siempre se me olvida...

-Tampoco quiero meterlo en un lio...

-... Bueno... no lo lapidarán si va con ella... puede que incluso lo miren mejor por lo que van a llevar...

Además, necesita salir de esta casa un poco.

-Tu dirás, Berenice.

Dudo un poco antes de decir.

-Prefiero preguntarle a él... él sabe mejor que nadie lo que le puede pasar si se presenta en esas circunstancias.

- bueno, pero daos prisa.

-Solo será un minuto.

Voy a la habitación de Basile y llamo.

- Adelante

-Hola otra vez, Basile.-digo entrando.- Me toca llevar lo que queda de los Sabbats al Príncipe, y están empeñados en que vaya con choffer.-digo algo disgustada.- ¿Te importaría ser tú o el príncipe se va a tomar muy mal que vayas?

- A mi no me importa... siempre que me dejes quedarme en el coche. No me gustaría tener problemas - sonríe.

------------------------------------------------------------------------------------------------

- Quizás, pero al menos se sentiraá útil. Y lo será.

Eso espero.

-... ¿Será capaz de hablar con el Principe antes de tropezarse con Pompingan?... No sale nada bueno de ese primogénito.

-Por mi perfecto... sinceramente, prefiero que seas tú y no otro. ¿No te importa si usamos tú furgoneta?

- Bueno, no es mía, es de Antón, pero vamos - dice levantándose.

----------------------------------------------------------------------------------------------------------

- Espero que sí, pero cabe la posibilidad. No tenemos más remedio que correr ese riesgo. De cualquier modo, mejor con ella que con otro.

-Hazme un favor Basile: ve preparando las cosas mientras me arreglo en condiciones. Si voy a ver al príncipe, será mejor ir con mejores pintas. Y no te preocupes, pese a lo que dicen de las mujeres, soy rápida.

-... ¿Villón no tiene ningún agente que no sean los siervos de Pompingan? -pregunto, un poco fastidiado, pero resignandome. Acabo suspirando-... Bueno... Quien no arriesga no gana. Sólo tiene que evitar mirarle a los ojos.

Basile asiente y prepara todo.

-------------------------------------------------------

- Efectivamente, un poco de cabeza y todo irá bien.

Dejo a Basile con las cosas y subo a la habitación. Allí está el niño, sentado.

-Vas a tener que perdonarme, pequeño.-digo, llendo al armario. Joder, ¿qué me pongo?.-Voy a tener que ausentarme un rato más...-Creo que sería buena idea un vestido de noche negro... me decido por uno elegante y algo provocativo, quiero jugar bien mis cartas... además, tengo uno perfecto que no hará que parezca que voy... "de caza", sino que quiero ir bien arreglada...- pero si esto sale bien.-digo cogiendo apresuradamente el vestido y cuatro cosas más que necesito para arreglarme.- habré dado un paso importante para recuperar a Arnold.
Me meto rápidamente en el baño, me peino procurando que mis ondas negras enmarquen mi rostro y hagan resaltar mis ojos azules. Procuro que no quede ni rastro de lágrimas en mi cara (que fastidio esto de llorar sangre) y procuro potenciar ese aspecto inocentón que parece imperenne en mi rostro. Me hecho un último vistazo con el vestido, arreglo un par de cosas más frente al espejo, y cuando al fin logro darme el visto bueno, salgo.

-Dime, pequeño, ¿crees que estoy preparada para una buena actuación?-Digo, guiñándole un ojo con sonrisa pícara. Acto seguido cojo unos zapatos negros de tacón y me los pongo.

//Fdi: si mientras el niño me dice algo...XDXD//

El niño no responde, es demasiado pequeño como para que llames su atención así, y no está familiarizado con ammbientes de gala. Como todos los niños, se aburriría en esos lugares.